No se si me gusta más la Holly Golightly fría, superficial y tensa de la novela de Capote, o la Holly alegre, disparatada, de la película. Lo que está claro es que convertir una novela dura y realista en una comedia romántica, a los puristas les puede parecer una aberración, pero el tiempo ha demostrado que fue todo un acierto. Porque cuando nos hablan de este personaje, nos viene a la cabeza la imagen dulce y sofisticada de Audrey Hepburn. La Holly cinematográfica, al contrario que la literaria, no esconde su tristeza, no hace daño, y no huye del amor.
El gato, para mi, es un personaje tan importante (o más) como los otros. Es increíble que un personaje mudo llene tanto una escena. Así que no he podido resistirme a inmortalizarlo también.
Es chulísima. Me parece además una excusa perfecta para que las niñas sepan que no sólo las princesas Disney son iconos.
ResponderEliminarAunque, la verdad, no me veo explicándole a mi hija la Holly Golightlly de Capote, que tiene poco que ver con la de la peli.
De momento para niñas mejor quedarnos con la Holly edulcorada de la peli. La de Capote, merece un análisis más adulto, me parece a mi. Pero el gato es trascendental igual ¡¡¡
EliminarEl gato es fundamental. Es el espíritu Holly en estado puro. Nada de Rangdoll adorable, un estilizado gato callejero, de mirada verde, y temperamento independiente.
EliminarYo también me he imaginado siempre al gato con los ojos verdes. Será porque me acuerdo tanto de mi gatita, que los tenía verdes también (snif, nostalgia).
EliminarPero si aquí también estáis con el dichoso gato!! Este gato me persigue desde ayer, ja ja ja creo que hoy voy a soñar con el gato :D
ResponderEliminarjajajaja el gato, el gato ¡¡si es que me encantan los gatos!! :)
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