Cojín con forma de gato.

De todos es sabido que me encantan los gatos. Tan es así que en mi próxima vida, me he pedido gata de sofá (en caso de que sea cierto eso de que existen vidas futuras). Mientras espero, he hecho este cojín con forma de gato tan simpático.

Me ha quedado un poco delgaducho porque se me acabó el relleno, cuando le haga engordar os pongo más fotos. Hoy de momento os cuento como va hecho por si queréis uno igual.

Necesitáis una tela lisa para el cuerpo del gato, y otra estampada para el aplique en forma de corazón. Yo elegí estas dos. La lisa hace como trama, es como lino o arpillera pero se arruga menos (si os soy sincera no se como se llama ese tipo de tela, pero en mi tienda de retales de confianza me entendieron perfectamente). También necesitáis otra tela para el relleno (yo utilicé tela de sábana blanca), hilo, botones, tijeras...

El patrón para el cuerpo del gato lo saqué de aquí. Como siempre, he hecho mis adaptaciones y ajustado el tamaño al imprimir para que me quedase como quería. El corazón lo dibujé a mano directamente, primero en un papel y luego sobre la tela. Para cerrar el cojín, he utilizado el método de solapas que ya os enseñé en los cojines de búhos, por lo que al cortar la parte de atrás tendréis que hacer dos piezas dejando tela sobrante para que se superpongan.

Una vez cortadas las telas, hice la cara del gato. Es mas cómodo coserlo así que con todo el cojín ya montado. Los ojos y la nariz son botones, y el resto va bordado a mano.

También cosí el corazón, este ya a máquina con un zig zag. Voy mejorando la técnica de los apliques.

El siguiente paso es hacer los dobladillos de la parte de las solapa de atrás. Os enseño como quedan por el derecho y por el revés. Como veis, por el derecho apenas se nota la costura.

Para el relleno, hice la misma silueta de gato en tela de sábana, rabo incluido. Para esto no me hace falta el cierre de solapa, así que van las dos piezas del cuerpo enteras y luego simplemente cerrada la costura para que no se salga. Si necesitáis meter más relleno en algún momento (como me ha pasado a mi, que se me ha quedado un gato delgaducho), simplemente descoséis un poco por el mismo sitio del cierre.

Y finalmente se monta todo el cojín. El relleno del rabo hay que meterlo en su pieza, y luego colocarlo para coserlo al resto del cojín. Para colocar el rabo, tendréis que ponerlo como en la foto, en la posición que vaya a ir pero hacia adentro. Así al dar luego la vuelta a la labor para que quede por el derecho, os quedará el rabo insertado en la costura.

Yo lo que hago es hilvanar todo para poder coser con más facilidad, pero podéis sujetar con alfileres también. Y no os olvidéis de sobrehilar las costuras para que no se deshilache la tela.

Finalmente metéis el relleno por la abertura que dejan las solapas. Para adornar un poco más le he puesto un lazo de organza marrón, aunque me parece un poco estrecho. Compraré otra cinta más ancha y lo cambiaré un día de estos.

¿A que queda simpático?

Con este post participo en fiesta de enlaces de personalización de blogs.